Dios nos Habla


Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras. Cuando haya entre vosotros profeta de Jehová, le apareceré en visión, en sueños hablaré con él.
(Números 12:6)

Sin embargo, en una o en dos maneras habla Dios; Pero el hombre no entiende. Por sueño, en visión nocturna, Cuando el sueño cae sobre los hombres, Cuando se adormecen sobre el lecho,
(Job 33:14-15)

_Visión_

Entonces hablaste en visión a tu santo, Y dijiste: He puesto el socorro sobre uno que es poderoso; He exaltado a un escogido de mi pueblo.
(Salmos 89:19)

Vé, pues, ahora, y escribe esta visión en una tabla delante de ellos, y regístrala en un libro, para que quede hasta el día postrero, eternamente y para siempre.
(Isaías 30:8)

Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella. Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.
(Habacuc 2:2-3)

Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor. Y el Señor le dijo: Levántate, y vé a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora,
(Hechos 9:10-12)

_Escriturá_

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
(2 Timoteo 3:16)

Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
(2 Pedro 1:20-21)

Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.
(Juan 14:26)

Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y vuestros ancianos soñarán sueños;
(Hechos 2:17)

Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones.
(Joel 2:28)

Que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.
(Apocalipsis 1:11)

Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
(Apocalipsis 21:5)

Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.
(Apocalipsis 22:19)

_Promesas_

No olvidaré mi pacto, Ni mudaré lo que ha salido de mis labios. Una vez he jurado por mi santidad, Y no mentiré a David.
(Salmos 89:34-35)

!Recuerda alabar a Dios¡

Éxodo 15:1-12

Por la historia de la iglesia cristiana, vemos que los signos de alabanzas con mayor gracia fueron escritos de la época más oscuras. Como ejemplo, vemos el himno _"Damos gracias a nuestro Dios"_, compuesto por el pastor de la iglesia luterana de Eilenburgo, Alemania, Martín Rinkart, hijo de un humilde herrero. El comenzó su ministerio un año antes de la Guerra de los 30 años (1618-1648).

Durante la Guerra, Eilenburgo recibió miles de refugiados que huían temeroso de la violencia. Esto causó hacinamiento, agravando la hambruna y la peste, y muchas personas murieron. El Pastor Rinkart asistió hasta 50 funerales en un solo día. Cuando Los Invasores, Vikingos suecos, pidieron un rescate millonario a cambio de no invadir o destruir la ciudad, el pastor Rinkart salió al frente a negociar valientemente con coraje y Fe, acompañado de cientos de feligreses. Al comienzo el comandante de las huestes escandinavas rechazó las súplicas del pastor luterano. Pero sus armas grande, la oración, y los cánticos de Dios, que finalmente tocaron el corazón del líder Invasor y redujo sus exigencias.

Luego de están duras experiencias el pastor Rinkart compuso este himno. "Damos gracias a nuestro Dios con todo el corazón, cosas maravillosas ha hecho y el mundo se alegra por ellas, nos ha bendecido en Nuestro camino con innumerables con este amor, Él es nuestro hoy, y por siempre lo será."

Indudablemente, Dios abrirá un camino para cruzar, Aunque usted esté ahora en ese lado del mar Rojo. Cuando él le abra camino, ¡Recuerde alabar a Dios!

Las reglas del Mar Rojo / Robert J. Morgan
Tomado de: "Tiempo con Dios es vida viva" Abril 2012 Pág 79